Ayer la mtb nos enseñó su cara más desagradable. Después de una ruta en Aznalcollar (Sevilla), cuando fuimos a recoger los coches, unos indeseables (no digo nada más fuerte para guardar las formas en el Blog) nos habían destrozado las lunas de 10 coches, robando lo que teníamos dentro.
Yo tuve la suerte, de que como no abrieron el maletero, no me quitaron nada, pero a otros compañeros les quitaron carteras, zapatos y radios...
Mezclar esto con el mtb es injusto, pues indeseables y vándalos los hay en todos lados, e igualmente nos podía haber pasado al recoger el coche tras ir al cine o ir de compras. Pero no puedes evitar relacionarlo.
Para mí cada sábado es una fiesta, el prepararlo, el madrugar, la ruta, el disfrutar trás ella de unas cervezas con los amigos y el cambiar impresiones por la tarde con Marga dando un paseo o cenando. Ayer estos dos últimos puntos fueron algo amargos... espero que nuncan más sucedan cosas como esta, que las personas que en esta sociedad no sean capaces de respetar una mínimas reglas de convivencia sean señaladas y apartadas de ellas...
Desde la rabia, pero ya algo en frío, diré que mi vida no va a cambiar en absoluto, el Jueves volveré a coger la bici, y el día 5 de abril volveré a Aznalcollar a hacer el 2º desafío... Se que aquí los perjudicados somos nosotros, que nos hemos resignado a que estas cosas pasan y los malhechores pueden campar a sus anchas, sin mayores problemas...
Yo no me resigno, y espero que algún día este tipo de cosas se castiguen como es debido. Mientras tanto, me queda el consuelo que tarde o temprano en la vida se mira hacia atrás, y que sería muy triste que no nos gustase ver lo que hay... yo sonreiré orgulloso de lo que he hecho y de lo que soy.
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